Dirigida por el director novel Cary Joji Fukunaga, quien se diera a conocer en 2005 en Sundance por su cortometraje 'Victoria para chino', 'Sin nombre' es un recomendable thriller que oscila entre la denuncia social y el romance, alternando el retrato de esa odisea que supone para los emigrantes ilegales cruzar la frontera con Estados Unidos, con el peligro de las maras que gobiernan los estratos más bajos de buena parte de latinoamerica.
De este modo, y sin que ello signifique -al menos a priori- demérito alguno, 'Sin nombre' opta sin pudor alguno por aproximarse al efectismo más hollywoodiense, al thriller de acción al uso, focalizando todos su esfuerzos por retratar tanto la violencia de las pandillas como el via crucis que muchos recorren para huir de éstas. Así pues, la ópera prima de Fukunaga se encuentra a medio camino entre el 'Slumdog millionaire' de Boyle y el 'Ciudad de Dios' de Meirelles, añadiendo quizá ciertas reminiscencias estilísticas del primer Iñarritu, si bien podría acusarse al film de recaer fácilmente en la obviedad en su vertiente más romántica, completamente prescindible y obviable a pesar de formar parte vital de su historia.
A pesar de ello, 'Sin nombre' transcurre con fluidez, gracias a su ritmo imparable y a una fotografía y una cámara notables, repleta de contrastes, colores saturados y travellings vertiginosos que le valieron su reconocmiento en Sundance este mismo año. Por contra, quizá cabría exigirle a la película de Fukunaga algo menos de efectismo y algo más de profundidad, a pesar de la impactante destreza fílmica con la que su joven director retrata a todo lo que rodea a la mara salvatrucha, sin duda lo mejor del film.